
“Hey, mira: nieve!!!.... hey, mira: semen!!!” Y así se resume la relación orgásmica entre el Ser Humano y la nieve....... fin......... no, espera, debería escribir algo más........ pues........ y yo me pregunto: por qué?!!!! A mí me gusta la nieve (y sobre todo si se trata de un paisaje donde todo es nieve virgen, con esa simplicidad blanca de sombras azules), pero nunca entenderé por qué la gente ve esa manta blanca y, hala, todos por el suelo a tocarla, a gritar y reírse y a tirarse bolas. Recuerdo, cuando era un moco, que salté del autobús al ver la nieve (y eso que era como la quinta vez que la había visto y tocado) y como loco fui a cogerla entre mis manos desnudas, y también recuerdo maldecirla a los 5 minutos por el dolor en mi piel. Idolatramos la nieve como si fuera lo más auténtico y maravilloso, cuando lo único que tenemos que hacer es abrir el congelador y encontrarla allí jodiendo, mientras susurra: “mira cómo te jodo todo; mira cómo ocupo espacio; mira como duelo en las manos; mira cómo hago que la puerta del congelador no cierre bien; dame un euro, primo, o te rajo…” (basado en hechos reales, que me contó mi vecina que a su nuera su congelador le dijo to' eso, y luego mató a su marido, la violó a ella y secuestró a sus hijos adoptados, a los que también violó y mató, y sobre los que escupió y orinó una vez muertos, y luego volvió a violar y a seguir vejando durante toda la noche… maldita nieve de mil demonios). Realmente me fascina mucho más la arena (tipo playas de Marruecos, no la arena falsa de mierda), con la que se puede hacer castillitos, y tortuguitas, y penes enormes, y te puedes enterrar, hacer agujeros y mil cosas… pero con la nieve no se puede hacer nada –y yo no sé cómo se las apaña la gente para hacer muñecos de nieve bien hechos, que yo creo que son un rumor malo.
A mí me gustaría que nevara en mi ciudad costera, por supuesto, por eso del sentimiento poético barato, pero bonito al fin y al cabo. Lo más que hay aquí es granizado, que es como una maldición divina: tu vas tan tranquilo por la calle cuando Dios comienza a mearte en la cara –llover- (y aquí debería decir que sería interesante que leyerais la letra de mi agüita amarilla de Los toreros muertos, para que podáis entenderlo bien), y tú sonríes y piensas que todo es bonito y maravilloso, aunque sólo a ratos, porque el agua helada entra por tu espalda y te cagas en todo el mundo, cuando de repente Dios se vuelve un graciosillo y te tira piedras –granizo-, y pasas de la supuesta belleza de las calles mojadas a tener sangre en la cabeza y desmayarte en el suelo mientras Dios te sigue lapidando y riéndose desde el cielo.
“Oh… mira qué bonito, vamos a subir a ver la nieve”, y el coche se para en una carretera llena de barro para ir todos a toquetear la nieve que hay en la cuneta, apenas 2 metros cuadrados de nieve llena de mierda (hoy estoy coprófago), barro y suciedad en general… qué hermoso!!! “Pero chiquillo, sal del coche; es que no disfrutas de la naturaleza? Eres un soso”, y aquí entra en conflicto el hecho de que a ti no te parece tan maravillo y estupendo llenarse las manos de frío barro mezclada con una cosa blanca, con que hay gente que se cabrea cuando no te parece bonito algo que a ellos sí: “joder, ya no os traigo más aquí, porque no queréis salir del coche, no disfrutáis de esto, coño, joder, culo, tetas, pis”. A mí me gustaría también hacer eso e insultar a la gente por no disfrutar de lo que yo sí, y hacer que se sientan culpables y convertir su vida en una absoluta miseria, y luego reírme de ellos, violarlos, matarlos, escupirles y mearles una vez muertos, y luego volver a violarles y esas cosas de las que disfruto y vosotros no porque no apreciáis la belleza de esos nobles actos que engrandecen al Ser Humano…. Caca, culo, tetas, pis.
yo aprecio los culos y las tetas, ¡que conste!
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